El mágico Federico.
Esta historia comienza en una tarde de
mucha lluvia en la ciudad de "Levinton" (ciudad ubicada al sur
del país Millleston), cuando Federico un joven de 14 anos, moreno, alto
y de ojos celestes caminaba por las calles de esta pintoresca ciudad, a
Federico le encantaba la lluvia y el invierno, él disfrutaba mucho el
camino del colegio hacia su casa con su paragua en la mano y su bufanda
al cuello para no pasaba frío. Después de 40 minutos de caminar sin
parar llegaba a su hogar (una bella casa de color azul oscuro, con una
gran ventana en el segundo piso donde estaba la pieza de Fede), nuestro
amigo entró a su casa y no encontró a su madre (Mónica) que siempre
lo esperaba con unas galletas horneadas y con un vaso de chocolate
caliente, que era lo mejor de caminar bajo el frió y la lluvia. Fede sé
dirigió hacia la mensajera principal de la casa pero no encontró ningún
mensaje de su madre, esto le pareció raro porque su madre si no estaba
dejaba un mensaje, por lo tanto fue a su habitación a esperarla, se
saco su abrigo y le puso en el perchero, miro la foto de su mejor amiga
Danae y de repente escucho unos golpecitos en la ventana, se acerco y
vio al pájaro mensajero de Danae que lo comunicaba con él ya que ella
vivía al centro de "Levinton" y no existía el teléfono.
El pajarito, llamado Lucky, traía un papel escrito por la madre de
Danae el cual decía: -Fede ayuda!!! el poder de infierno ha regresado,
Danae esta en peligro- Fede no soporto que este malvado haya secuestrado
a su mejor amiga por lo que él sentía algo más, por lo tanto decidió
ir a buscarla. Lordenor vivía en el país "Darknoc" a las
afueras de Milleston, pero en otro país. Él era el llamado rey
infernal, dominaba el país de Darknoc y quería apoderarse de
Milleston. Lordenor había secuestrado hace 10 años atrás al padre de
Fede y lo hipnotizo con sus poderes malévolos para que trabaje para él
y nunca más volviera con su familia. Fede
le dejo un mensaje a su madre, se puso su abrigo y su bufanda y salió
con su paragua. Afuera llovía más que nunca, hacía mucho frío, pero
Fede cubrió su cabeza con un gorro de lana tejido por su madre y se
encamino a la estación de autobuses para viajar al pueblo de Lordenor.
El autobús que abordo era viejo y pasaba el frío por todos lados pero
Fede no podía abandonar a Danae y tampoco a su madre que de seguro
estaría allí también. Todavía no podía darse cuenta de cómo los
seguidores de Lordenor habían ingresado a su ciudad si el ejército no
dejaban pasar a nadie de aquel lado de la frontera. Fede bajo del autobús
que lo llevo al puente de comunicación de exportación con el país
vecino que custodiaba el ejército. Fede decidió cruzar el puente por
abajo, ahí nomás del fuerte y congelado río cuando se dio cuenta de cómo
habían pasado los seguidores de Lordenor. Cruzo el puente y rozó
muchas veces el agua helada con las piernas. Llegó al otro lado al cabo
de 15 minutos y emprendió viaje hacia el castillo de Lordenor. Llegó a
una gran casa con forma de castillo y un escalofrío invadió su pequeño
cuerpo. Decidió entrar. Cruzó el puente que no tenía ningún guardia
(algo muy raro) y llegó a un gran salón donde lo esperaba su amiga su
padre y miles de personas con diferentes armaduras. Del fondo del salón
llegó una fría vos que dijo –Al fin has llegado sobrino mío- esto
le extraño a Fede y le contesto –yo no soy tu sobrino desgraciada
rata- y un murmullo invadió el salón. De repente apareció su madre y
le dijo – él es tu tío el que desapareció hace 7 años- y Fede
lleno de odio corrió hacia él y le dijo – suelta a todas estas
personas- pero su tío le contesto –Fede, Fede no sabes hace cuanto
que quise hacer que tu padre te traiga acá pero el siempre traía a
cualquier pibe en ves de a vos- respiro profundo y continuo- hasta que
me di cuenta que si capturaba a tu noviecita vendrías a buscarla, claro
que tu mamá se adelanto. -Acá me tienes pero ¿para qué me quieres?- dijo
Fede en un tono inseguro. - Tu Federico Barbín, tiene un poder único, un poder
mágico que me hará invencible y ahora pasará a ser mío, mátenlo- le
dijo a sus seguidores y estos obedecieron.
De repente Federico estuvo rodeado de personas, y se dijo para sí
mismo por favor tenés que salir de está, y lo repitió varias veces.
Cuando abrió los ojos descubrió que estaba sobre la lámpara y todos
lo estaban buscando, y ahí comprendió cual era su poder. Y desapareció
otra vez; al cabo de dos minutos volvió a aparecer con dinamita la cual
dejo en la lámpara y fue en busca de su padre, su madre y Danae. Los
agarró y desaparecieron todos y volvieron a aparecer afuera del
castillo. Fede volvió a desaparecer y cuando volvió el castillo explotó
en mil pedazos matando a todos los que estaban dentro.
Fede fue premiado con la medalla de honor de su ciudad y después
de un largo festejo, fue y le preguntó a su padre y su madre –¿Cómo
es que tengo un poder mágico? Al cual sus padres respondieron – tú en
verdad no desaparecías, o sea lo hacías pero solo para tus enemigos.
Pero ese poder es interior y solo lo activas cuando tu corazón te lo
permite. |
FIN.
Autor: Diego Black de Gryffindor.